A quién se hace cirugía
Mucha gente con cáncer es tratada con cirugía. La cirugía se usa mejor para tumores sólidos que están contenidos en un sitio. Es un tratamiento local, lo que significa que trata solo la parte de su cuerpo que tiene el cáncer. No se usa para leucemia (un tipo de cáncer de la sangre) o para cánceres que se han extendido.
Algunas veces la cirugía será el único tratamiento que usted tendrá. Pero, con más frecuencia, usted tendrá otros tratamientos del cáncer.
Cómo funciona la cirugía contra el cáncer
Dependiendo de su tipo de cáncer y de lo avanzado que esté, la cirugía puede usarse para:
- Extirpar todo el tumor: la cirugía extirpa el cáncer contenido en un sitio.
- Reducción del tumor: la operación extirpa algo del tumor canceroso, pero no todo. Reducción se usa cuando, si se extirpara todo el tumor, se podría dañar un órgano o el cuerpo. Al extirpar parte de un tumor se puede ayudar para que otros tratamientos funcionen mejor.
- Alivio de los síntomas del cáncer: esta cirugía se usa para extirpar tumores que causan dolor o presión.
Riesgos de la cirugía
Los cirujanos están altamente capacitados y harán todo lo posible por evitar cualquier problema durante la cirugía. Aun así, algunas veces ocurren problemas. Los más comunes son:
- Dolor
Después de la operación, la mayoría de la gente tendrá dolor en la parte del cuerpo en donde se operó. Cuánto dolor sentirá usted dependerá de la extensión de la cirugía, de la parte de su cuerpo en donde tuvo la operación y cómo siente usted el dolor.
Su doctor o su enfermera pueden ayudarle a controlar el dolor después de la cirugía. Hable con su doctor o con su enfermera antes de la operación acerca de las formas de controlar el dolor. Después de la operación, dígales si su dolor no se ha controlado.
- Infección
Una infección es otro problema que puede suceder después de la cirugía. Para ayudar a evitar una infección, siga las instrucciones de su enfermera para cuidar del área en donde tuvo la cirugía. Si se presenta una infección, su doctor puede recetar una medicina (llamada antibiótico) para tratarla.
Otros riesgos de una operación son la hemorragia, el daño a tejidos cercanos y las reacciones a la anestesia. Hable con su doctor sobre los posibles riesgos para el tipo de cirugía que tendrá usted.